¿Cada Cuánto Debo Descalcificar Mi Cafetera?

Esta es una de las grandes preguntas que todos los usuarios nos hacemos cada vez que pensamos en el proceso básico de mantenimiento de nuestra cafetera: la descalcificación: ¿cada cuánto debo descalcificar mi cafetera?

Todos somos más o menos conscientes de la importancia de descalcificar nuestra cafetera para evitar que se acumulen sedimentos e impurezas en los conductos interiores, que puedan llegar a alterar el sabor o las propiedades de nuestro café. Pero, en realidad, no muchos usuarios están habituados a hacerlo. Y en consecuencia, no sabemos cada cuánto tiempo conviene iniciar el proceso de descalcificación.

En este artículo vamos a darte algunas pistas para que sepas calculas cada cuánto tienes que descalcificar tu cafetera, con independencia del tipo de cafetera que tengas: express o de cápsulas. Eso sí, luego ya serás tú el único responsable de acordarte de hacerlo correctamente cuando toque 🙂 Para eso tienes nuestras guías de descalcificación.

¿De qué depende la frecuencia de descalcificación?

El tiempo que debemos dejar pasar como máximo entre dos procesos de descalcificación viene dado por dos factores:

• En primer lugar, la frecuencia de uso de tu cafetera. No tiene el mismo desgaste una cafetera que saca un café al día, que una cafetera que ponemos en marcha 4 o 5 veces en la misma jornada. Cuantas más veces uses tu cafetera al día, más frecuentes deben ser las descalcificaciones.
• Y en segundo lugar, la dureza del agua de tu ciudad. Un agua muy dura nos obligará a descalcificar la cafetera con mayor frecuencia que si usamos aguas blandas.

¿Qué es la dureza del agua?

No vamos a entrar en terminología científica, pero podemos definir a grandes rasgos la dureza del agua como la cantidad de minerales (más concretamente, calcio y sales de magnesio) que tiene concentrados. Precisamente de la acumulación del calcio es de donde proviene el concepto y la necesidad de descalcificar. Se dice que un agua es muy dura cuando tiene una alta concentración de minerales, mientras que un agua muy blanda tiene una baja presencia de estos.

La aplicación de este concepto a las cafeteras es evidente: a mayor cantidad de minerales que circulen por los conductos internos de la cafetera, mayor cantidad de restos y sedimentos quedarán depositados en ellos con el paso del tiempo.

Como es lógico, lo mejor para el mantenimiento de nuestra cafetera es usar siempre agua blanda. Pero esto no depende de nosotros, ya que lo más normal es que empleemos agua del grifo y tengamos que conformarnos con la calidad de la misma. Así que no nos queda más remedio que descalcificar la cafetera periódicamente para aliviar los posibles efectos que un agua con alta concentración de minerales tendrá sobre nuestra cafetera.

Si resides en España, echa un vistazo a este práctico mapa que a grandes rasgos nos indica cuál es la dureza del agua en cada una de las provincias españolas. Tómatelo como una referencia, ya que el valor más exacto siempre lo conocerás realizando un test.

Derechos de la foto: Mi-Descalcificador.com

¿Cómo se mide la dureza del agua?

Ya hemos dicho que se suele usar agua del grifo para preparar el café con nuestras cafeteras domésticas. Si no conoces cuál es la dureza del agua en tu ciudad, no te preocupes porque en la mayoría de kits de descalcificación encontrarás, además de los sobrecitos con el producto descalcificante, una pequeña tira de plástico que no es más que un test de dureza del agua.

Más o menos suelen tener este aspecto:

Derechos de la foto: Mi-Descalcificador.com

Usar este test es muy sencillo: simplemente debes meter la tira de plástico en un vaso de agua, y esperar unos segundos. Cuando la saques, la tira tendrá marcados unos colores o se resaltarán determinadas marcas. Puedes verlo en la fotografía anterior.

Esto constituye el código mediante el cual sabrás cuál es la dureza del agua que acabas de testear. Lo normal es que cuantas más marcas tenga el test, más dura sea el agua. Consulta las instrucciones de tu test o kit descalcificador para mayor información a este respecto.

Tabla final de frecuencia de descalcificación

Teniendo en cuenta estas dos variables -frecuencia de uso  y dureza del agua-, podemos elaborar una tabla básica de referencia, que nos dirá cada cuánto debemos descalcificar nuestra cafetera:

• Si consumes 1 café al día + agua blanda = debes descalcificar cada 2 años
• Si consumes 1 café al día + agua dura = debes descalcificar cada año
• Si consumes 2 cafés al día + agua blanda = debes descalcificar cada año
• Si consumes 2 cafés al día + agua dura = debes descalcificar cada 6 meses
• Si consumes 3 cafés al día + agua blanda = debes descalcificar cada 6 meses
• Si consumes 3 o más cafés al día + agua dura = debes descalcificar cada 3 meses

En fin… después de todas estas cuentas ya no podrás decir nunca más que no sabes cuándo descalcificar tu cafetera, ¿verdad? Pues a partir de ahora ya sabes, compra un buen descalcificador para cafeteras y ponte manos a la obra. Tu cafetera te lo agradecerá, y tu paladar seguro que también.

NOTA: La anterior es simplemente una tabla de referencia genérica. Ajusta los tiempos en función de ella. Por ejemplo, si tu agua tiene una dureza media, entonces será suficiente que hagas las descalcificaciones cada 4-5 meses si la usas muy a menudo, o cada 9 meses sin consumes 2 cafés al día. Consulta siempre las instrucciones de tu cafetera para saber cada cuánto debes realizar la descalcificación.