¿Qué tipos de té existen?

En el mundo del té y las infusiones caben muchas variantes, y tal como veíamos en su momento en la guía de tipos de café, vamos a conocer en profundidad cuáles son los tipos de té que existen.

Antes de conocer los principales tipos de té y sus beneficios, tenemos que subrayar que en el mundo existen muchas más variedades de té de las que comentamos aquí. Muchas de ellas tienen una producción y un consumo locales, muy pequeños, y sería imposible abarcarlos todos en una sola publicación. De forma que vamos a ceñirnos a los principales tipos de té que todos conocemos y que más extendidos están por todo el mundo.

Estas clases de té se categorizan o se distinguen principalmente por su nivel de oxidación, y cuentan con propiedades diferentes. Como es lógico, cada uno de ellos es más o menos popular en función de la región del mundo donde nos encontremos. En algunos casos existen incluso variedades muy conocidas de algunas de ellas, que también detallaremos en cada uno de los apartados. Y también existen mezclas o blends de té, como ocurre con los blends de café, que ya multiplican las opciones y los resultados posibles hasta casi el infinito.

La oxidación es una reacción química que el productor de té puede controlar para conseguir sabores, aromas y matices diferentes en cada taza de té. Y en función de ese proceso, se obtiene un tipo de té con unas características determinadas.

Té Negro

Comenzamos por el té negro, que es el más oxidado de todos y uno de los más conocidos -sino el que más- en España. Aquí lo conocemos como té negro, pero en China se le suele llamar té rojo (pu ehr)… pero no nos confundamos. Es prácticamente el mismo.

Al ser el tipo de té con mayor oxidación, su sabor es intenso, fuerte, tiene más teína… y debe prepararse con agua más caliente de lo normal. Se recomienda emplear agua justo por debajo del punto de ebullición: entre los 95º C y los 100º C.

Propiedades del té negro

Las propiedades y beneficios del té negro vienen derivados en gran medida de su proceso total de oxidación (como sucede con el sabor fuerte que lo caracteriza). Este es el resumen de las más significativas:

• Ayuda a la circulación, gracias a la dilatación y contracción de los vasos sanguíneos.
• Su alto contenido en cafeína le otorga propiedades similares a la del café en cuanto a estimulación, concentración y beneficios en la memoria.
• Previene la caries, por su alto contenido en flúor.
• Es bueno para el metabolismo, la depuración y colabora con los procesos diuréticos.
• Es antioxidante.
• Ayuda a mantener una buena densidad ósea (previene la osteoporosis).

Té Earl Grey

El té negro, como ya hemos dicho, es uno de los más populares en Europa y en general en el mundo occidental, mientras que en China se consume más el rojo entre los tés fuertes.

Algunos de los tipos de té negro más conocidos, que seguro que los habrás visto alguna vez en el supermercado, son el Earl Grey y el English Breakfast. Pero… ¿sabes exactamente cómo son y qué los distingue?

Pues el té Earl Grey es un té negro que está aromatizado con aceite de bergamota: un cítrico a medio camino entre la lima y la naranja que solo se cultiva en regiones muy específicas del mediterráneo (principalmente en la región italiana de Reggio Calabria). Como es natural, la contribución de la bergamota le da un sabor y aroma muy característicos al té negro Earl Grey.

Té English Breakfast

Este es el té típicamente británico (efectivamente, su nombre no lleva a engaño) y al concebirse como un té de desayuno destaca por sus propiedades estimulantes, fuertes, y su sabor intenso. De ahí también la costumbre británica de añadirle leche e incluso azúcar.

¿De qué está hecho el té English Breakfast? Pues se trata simplemente de una mezcla o blend de tés negros de diverso origen, pero siempre con un denominador común: su potencia y su sabor. La combinación más tradicional es la que lleva hojas de tés procedentes de Assam (India), de Sri Lanka y de Kenia.

Té Rojo

El té rojo es el conocido como pu ehr, muy popular en China y bastante similar al té negro que consumimos más en occidente. En algunos sitios leerás que el negro y el rojo son el mismo té, conocido por distinto nombre según estemos en China o en Europa… pero esta afirmación no es del todo exacta.

La diferencia fundamental entre el té negro y el té rojo es que este último es semifermentado, a través de un proceso que se prolonga por dos o tres años. La hoja del té negro, por contra, sufre una oxidación total, motivo por el cual es mucho más fuerte que los demás, pero no pasa por la «post-fermentación» después de oxidarse, como el rojo.

A modo de curiosidad, te diremos que el té rojo se descubrió de manera accidental, al intentar alargar el proceso de conservación natural del té verde original.

Propiedades del té rojo

Entre las propiedades y beneficios del té rojo, que en algunos casos coinciden con las del negro, podemos citar las siguientes:

• Es muy digestivo (ideal para tomar tras una comilona)
• Tiene alto contenido en flúor, así que ayuda a proteger los dientes.
• Dispone de excelentes propiedades diurética y depurativas, así que es bueno para el bazo y para el hígado.
• Controla los niveles de colesterol LDL.

Té Verde

Podríamos situar al té verde en el extremo contrario a los tés negros y rojos que acabamos de conocer. Este es un té sin fermentar, suave, que no atraviesa ningún proceso de oxidación y cuyas hojas simplemente se prensan y se calientan durante breves períodos de tiempo.

Propiedades del té verde

• Es el té con mayores propiedades antioxidantes.
• Suele ser un buen complemento para dietas que busquen bajar de peso. ¿Nunca has oído hablar del té verde para adelgazar?
• Limita los niveles de colesterol.
• Tiene mucha menos cafeína (o teína) que los demás.
• Proporciona beneficios generales para el sistema inmunológico.
• Alto contenido en minerales y en vitaminas A, C y E.
• Ayuda a reducir los niveles de glucosa en la sangre.

Té Matcha

En realidad, el té matcha no debería constituir una categoría aparte, porque se encuentra dentro de la variedad del té verde. De hecho, podríamos considerarlo como un té muy verde. Pero tiene unas particularidades tan curiosas y distintas al resto, que se suele denominar como una variedad en sí mismo.

El té matcha japonés es, esencialmente, un té verde en polvo, que se obtiene triturando o moliendo las hojas (incluyendo la parte de los tallos, sin descartar nada) de mayor calidad de los arbustos del té, y se protegen con un proceso de vaporizado para evitar que se oxide. Es un té, por tanto, sin oxidar. Y se utiliza mucho en la ceremonia del té japonés, de ahí que lo asociemos permanentemente al país nipón aunque en realidad provenga de China.

A resultas de su peculiar aspecto, tampoco se elabora de la misma manera que el resto. No hay hojas que infusionar, sino un polvo de color verde intenso (muy similar al pistacho) que se debe procesar con un set para preparar té matcha.

Propiedades del té Matcha

• Tiene mayores propiedades antioxidantes que el té verde normal.
• Ayuda a la relajación y a reducir el estrés.
• Reduce los niveles de colesterol en sangre.
• Acelera la quema de grasas, por lo que suele utilizarse en dietas para adelgazar.
• El proceso de recolección y triturado del té matcha es más laborioso que el té verde convencional, así que su producción -y su precio final en el mercado- es bastante más caro.

Té Blanco

Conocido como Pai Mu Tan, el té blanco es un tipo de té muy apreciado y consumido en China, aunque mucho menos en el mercado occidental. Al igual que el té verde, el blanco es un té no fermentado.

Se considera un té muy selecto, de enorme calidad, y se obtiene escogiendo únicamente los brotes más jóvenes de la planta para la recolección, antes de que se oxiden.

Propiedades del té blanco

• Fortalece la salud de nuestra piel y de nuestro pelo.
• Al igual que el té verde, al estar poco oxidado conserva una alta cantidad de antioxidantes. Los antiguos chinos lo denominaban el té de la belleza o té de la eterna juventud, debido precisamente a estos beneficios tan visibles.
• Combate el envejecimiento de las células.
• Es altamente diurético.
• Es el tipo de té que menos teína o cafeína contiene de todos.

Té Amarillo

El té amarillo, originalmente denominado huang da cha, es quizá el más desconocido de todas las clases de té que estamos repasando en este artículo, al menos por estos lares «occidentales» del planeta. Solo se produce en China, es muy caro de traer a Europa, y por ello muchos consumidores no lo conocen.

Se trata de un té suave, parecido al verde, que sufre un leve proceso de oxidación húmeda (detenido y controlado artificialmente mediante calor seco) que es lo que provoca que sus hojas pasen del color verde al amarillento.

Fruto de ser un té algo más oxidado, no tiene la astringencia del té verde, y también es más aromático. Debe prepararse en agua no tan caliente como los tés que se oxidan por completo. Alrededor de 80º C es suficiente.

Propiedades del té amarillo

• Ayuda a la concentración.
• Contiene una gran concentración de minerales.
• Tiene un aroma muy característico, más potente que el de los tés más suaves.
• Es beneficioso para combatir cualquier tipo de enfermedad o problema gástrico.
• Conserva las propiedades diuréticas y antioxidantes de los tés verdes y blancos, aunque en menor medida que estos.

Té Oolong o té azul

Hasta hace no mucho, el té azul era igual de desconocido en Europa que el amarillo que hemos visto antes. Sin embargo, los últimos tiempos su popularidad ha crecido exponencialmente… ¿a qué todos habéis visto alguno vez el nombre de té Oolong, o té Wulong? Pues ese es el nombre verdadero del té azul en China.

El té azul o té Oolong es el que se sitúa a medio camino entre el té verde (sin oxidar) y el té negro (totalmente oxidado). Se trata de un té semioxidado, que pasa por el mismo proceso que el té negro pero que no se deja oxidar hasta el final. Por lo tanto, sus propiedades y sus matices están a medio camino entre ambos: tiene, por ejemplo, menos cafeína que el negro pero más que el verde.

Existen muchísimas variedades de té azul, en función del tiempo de oxidación que haya sufrido (no es igual un té oxidado al 30% que uno oxidado al 70%), de modo que se trata de uno de los grupos de té más extensos y variados de toda la gama cromática que acabamos de repasar.

Propiedades del té azul

• Ayuda a suavizar los niveles de colesterol.
• Mejora el sistema circulatorio, la presión de las arterias y el sistema cardiovascular en general.
• Presenta buenas propiedades digestivas, así que es ideal para tomarlo después de las comidas.
• Mantiene las propiedades antioxidantes, aunque lógicamente en menor medida que el té verde.
• Podemos incluirlo en dietas de adelgazamiento debido a que acelera el metabolismo.

En resumen, y si ordenamos todos los principales tipos del té del mundo de menos oxidado (suave) a más oxidado (intenso), tendríamos la siguiente lista: té blanco, verde/matcha, amarill, azul, negro y por último el té rojo, que además de estar totalmente oxidado lleva un proceso de fermentación posterior.

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